Los huevos rotos con jamón son uno de los platos más icónicos de la gastronomía española. Sencillo, delicioso y lleno de sabor, este plato es una opción ideal para cualquier comida del día. Hoy, en La Casa del Jamón, os hablamos de este clásico irresistible.

Por qué triunfan los huevos rotos con jamón

Su popularidad se debe tanto a la combinación de ingredientes frescos como a su fácil preparación, lo que lo convierte en una de las recetas más solicitadas en bares y restaurantes de tapas en toda España.

Los huevos rotos con jamón tienen sus raíces en la cocina tradicional de España. Aunque es especialmente conocido en las regiones de Madrid y Castilla y León, su consumo se ha extendido por todo el país.

Este plato refleja la esencia de la cocina española: hacer de ingredientes simples una delicia gastronómica. Su base principal son los huevos, las patatas y el jamón ibérico, productos típicos de la despensa española.

Y es que la combinación del huevo frito, con su yema líquida y cremosa, junto con el jamón ibérico o serrano, curado y con un sabor intenso, crea una explosión de sabores en cada bocado. A su vez, la yema líquida del huevo, la patata frita crujiente y el jamón curado ofrecen una experiencia sensorial única.

Cómo tomarlo y variantes

Los huevos rotos con jamón son un plato perfecto para compartir en reuniones familiares o entre amigos. Su presentación invita a degustarlo de manera informal, rompiendo los huevos y mezclándolos con el resto de los ingredientes en el momento de servir.

Lo habitual es acompañarlo con una buena rebanada de pan, ideal para «mojar» en la mezcla de yema y aceite. También marida perfectamente con un buen vino tinto o una cerveza fresca, lo que hace de los huevos rotos con jamón una opción ideal tanto para comidas como para cenas ligeras.

Aunque la receta tradicional es muy sencilla, se pueden añadir ingredientes adicionales para darle un toque personal, como pimientos, cebolla o espárragos trigueros.