La gastronomía española es famosa a nivel mundial. En ella abundan elaboraciones sencillas, pero deliciosas, que enamoran a quien las prueba. Hoy, en el blog de La Casa del Jamón, os hablamos de una de ellas: la sopa castellana. Un imprescindible cuando aprieta el frío.

Qué es la sopa castellana

La sopa castellana, también conocida como sopa de ajo, es una de las sopas más emblemáticas de la gastronomía española. Con origen humilde y arraigada en las tradiciones culinarias de Castilla y León, esta receta sencilla y reconfortante ha conquistado paladares de todo el país y más allá.

Su esencia reside en un equilibrio de sabores que combinan la suavidad del pan duro, la frescura del huevo escalfado y el toque intenso del ajo, todo ello aromatizado con pimentón y enriquecido con el caldo de carne o verduras y jamón. Así, la sopa castellana es una oda a la versatilidad y el aprovechamiento de ingredientes.

La preparación de la sopa castellana es tan sencilla como reconfortante. Se comienza por dorar los ajos en aceite de oliva, a los que se añade el pan cortado en rebanadas y tostado ligeramente. A continuación, se añade el jamón para que se dore ligeramente y potencie el sabor de la sopa. Luego, se incorpora el pimentón, elemento fundamental que aporta un toque de sabor y color característico a la sopa.

El caldo, ya sea de carne o de verduras, se añade en esta etapa, permitiendo que los sabores se integren y se fortalezcan. Finalmente, cuando la sopa está ya casi lista, se introducen los huevos, creando una textura única para culminar el plato.

La sopa castellana es una receta que se adapta a diversas preferencias y gustos. Algunos prefieren una sopa más líquida, mientras que otros prefieren una textura más espesa. También se pueden agregar otros ingredientes, como chorizo o verduras, para enriquecer el sabor y variar el plato.

Independientemente de las variaciones, la sopa castellana conserva su esencia como un plato reconfortante y nutritivo, ideal para calentar el cuerpo en los días fríos y brindar una sensación de bienestar. Su simplicidad y sabor la convierten en una receta apreciada por personas de todas las edades, como un reflejo de la riqueza y la tradición culinaria española.