En La Casa del Jamón tenemos en oferta nuestras bolsas de picadillo de jamón ibérico, pero ¿qué usos podemos darle?. Te mostramos cómo hacer sal de jamón.
La sal de jamón no es más que un proceso de secado y en el que se obtiene una textura de sal y con todo el sabor concentrado del jamón ibérico.
Para ello podremos, tanto usar los retales que nos hayan sobrado, como lonchas o el propio picadillo que ofrecemos.
Preparación de la sal de jamón
- Precalentamos el horno a 200 grados centígrados durante 10 minutos.
- En una bandeja disponemos los trocitos de jamón o lonchas, bien extendidos sobre papel de horno sulfurizado. Los tapamos con otra hoja de papel de horno y ponemos algo de peso sobre este último papel para que quede todo bien presionado.
- Con la bandeja ya metida en el horno dejamos el jamón hasta que se quede crujiente y seco durante aproximadamente quince minutos.
- Pasado ese tiempo dejamos enfriar y en un mortero ponemos los trozos para machacarlos hasta obtener un polvillo fino que nos recordará a la sal.
Si en vez de utilizar el horno queremos hacerlo en el microondas, el proceso es similar, pero la temperatura la pondremos media-alta y el tiempo lo reduciremos a unos cinco minutos, aunque como cada microondas es diferente, tendrás que observar que el resultado que queremos obtener es algo crujiente y seco.
Si sigues estos sencillos pasos tendrías lista la ansiada sal de jamón.
Usos que podemos darle
Podemos emplearla para cualquier plato en el que queramos darle un gusto a jamón ibérico, como por ejemplo:
- Aderezos para ensaladas.
- Pinchos.
- Tartas saladas.
- Cremas.
- Sopas.
Os recomendamos su uso porque da un toque diferente a los platos.
Te recordamos que en La Casa del Jamón, puedes elegir cualquier jamón y nosotros te lo aprovechamos al máximo y lo envasamos al vacío, loncheado y por partes.
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